En casa de Barbara

Anoche estuvimos charla y charla en la sala-cuarto de la casa de Barbara. Nos acostamos con un dolor y olor terrible a tabaco. La platica fue bien interesante aunque yo me dormi en el monologo. Les encanta hablar, el mexicano con una breve introduccion de quien eres, se lanza a su discurso con el unico deseo de ser escuchado, mas que de intercambiar ideas. Pide justamente lo que no puede dar, pero asi parece ser. Hay que gritar mas fuerte.
Maria Jose y yo fuimos a ver al medico naturista, tio de Quique, hoy a las 4pm, a Don Jorge. Le dio una soba y le puso calor con la luz roja. Tambien, para que no le volviera a ocurrir un esguince, le hizo ventosas en todo el pie. 100 pesos y un paseito por el jardin de las orquideas, una verdadera maravilla. gracias pues.
El resto fue una tarde bien tranquila.